*Su vida parecía destinada a las albercas, era una gran velocista bajo el agua hasta que conoció el boxeo y la vida cambió para siempre
Antonio Zamora
Puebla, Pue.- Alma Gabriela Téllez Vázquez es valiente porque no le tiene miedo al cambio. Cuando estaba en el mejor momento de su carrera como nadadora, decidió emprender su camino en el difícil mundo del boxeo y con 16 años de edad decidió mudarse de las albercas a los cuadriláteros. Hoy es una de las mayores prospectos de Puebla.
Su vida parecía destinada a las albercas, era una gran velocista bajo el agua sobre todo en el estilo de crol, y fue justamente buscando algún método para mejorar su técnica que empezó a entrenar boxeo y sin saberlo, ahí cambió la vida.
“Nadé unos diez años, incluso competí porque era buena en velocidad, inicié siendo dorsista, pero luego me convertí en crolista. Pero como parte de una estrategia para mejorar mi velocidad, decidí comenzar a entrenar boxeo porque veía que ahí podía desarrollar fuerza y agilidad. Entré, me gustó mucho y sí me ayudó en la alberca”.
Ahora ella es un alma guerrera arriba del ring, ha competido a nivel nacional, tuvo su debut internacional en septiembre en el Campeonato Panamericano en Brasil, aunque en su momento se retiró de los cuadriláteros.
“Participé en un Nacional de Boxeo Élite en 2017 y después de eso le puse pausa a mi carrera en el boxeo porque entré a la universidad a estudiar Fisioterapia y mis horarios eran muy complicados, además sabía que si no entrenaba bien y me subía a pelear me podían dar un mal golpe, entonces lo dejé”.
Fueron prácticamente cuatro años los que estuvo alejara de los cuadriláteros, lapso en el que se centró en su carrera en fisioterapia, pero su cuerpo resintió la inactividad deportiva y aumentó de peso, por lo que pensando en su salud, volvió al gimnasio.
“Regresé después de la pandemia y fue mi salud, estaba comiendo mucho y llegué a pesar hasta 72 kilos que son mucho para mi porque cuando peleaba inicié en 57 kilos y luego subí a 60 por mi estatura. Inicié en el gimnasio de unos amigos solo pensando en activarme y nada más por hobby”.
Con está vuelta a la actividad boxística ya con una madurez importante, ha alcanzado sus mejores resultados por ejemplo, en el Torneo de los Barrios en el que experimentó otra vez la adrenalina de subirse al ring en busca de un trofeo y su regreso fue triunfal porque se coronó como la mejor del torneo y después en julio se ganó su lugar en el Certamen Nacional Élite.
“El año pasado regresé a competir, primero iba a ir la Nacional, pero se canceló por la pandemia, y estuve entrenando en el Instituto Poblano del Deporte, tuve algunas peleas hasta que en este año participé en el Torneo de Barrios y lo gané, luego fui a los clasificatorios para el Certamen Nacional Élite y clasificamos”.
Alma Téllez busca transcender en el boxeo y ser la nueva cara de este deporte en Puebla, pero para alcanzar esa meta, ha tenido que dividir su día en una serie de actividades que prácticamente no le dan respiro, pues además de entrenar, trabaja como fisioterapeuta y los fines de semana atiende el negocio familiar de cemitas.
“En el negocio de cemitas trabajamos todos, hemos conocido mucha gente, tiene temática de futbol, pero mucho de los clientes ya conocen mi historia con el box y se acercan. Yo trabajo ahí los fines de semana porque entre semana entreno, hago servicio social en Cuautlancingo y doy fisioterapias en Cholula. Las cemitas El Ruso están en la avenida Puebla en Sactorum, Puebla, a unos metros de la Gran Bodega”.