*Doña Gloria Romano mantiene la tradicional preparación del cacao de agua de chocolate
Jaime Carrera
San Pedro Cholula, Pue.- Las ágiles manos de la señora Gloria Romano sostienen un molinillo que gira y gira, cada vez más rápido, y de manera veloz emerge una espuma café que se mantiene a tope al interior de una olla de barro en donde se prepara uno de los elixires de los dioses.
La mujer tiene una gran responsabilidad: mantener la tradicional preparación del cacao de agua de chocolate, cuyo nombre en náhuatl Xocolátl significa “agua amarga” y cuya receta original ha sido compartida de generación en generación en la familia de la señora Romano.
Durante los últimos 40 años, Gloria ha acudido sin falta al mismo lugar: el tradicional y colorido mercado “Cosme del Razo”, ubicado sobre la avenida Miguel Hidalgo, a tan sólo una cuadra del zócalo de la milenaria ciudad y Pueblo Mágico de San Pedro Cholula.
En las calles, tianguis y sitios turísticos de San Pedro y San Andrés Cholula, así como en municipios aledaños es común observar a mujeres, hombres y jóvenes vender este prehispánico líquido, pero el sello característico de Gloria y su familia es el respeto total por esa bebida.
El Xocolátl data de hace más de dos siglos y en el caso de la señora Romano, su preparación ha alcanzado a cinco generaciones, ella recuerda que sus inicios fueron cuando tenía 8 años y en total en San Pedro Cholula sus antepasados los elaboran desde hace seis décadas.
La familia López ha sabido preservar cada detalle para que el cacao sepa a lo que tiene que saber, cantidades exactas de ingredientes, giros y giros con el molinillo y el amor por su trabajo, les han permitido ser uno de los negocios más queridos en San Pedro Cholula.
Su negocio no podía llevar otro nombre: “En el Corazón de Cholula”, pues justo allí, hace 60 años en el zócalo cuando era un recinto ocupado por los comerciantes para la vendimia de productos, su madre, Doña Mati, comenzó su larga historia con la exquisita bebida.
Doña Gloria tiene muchas cosas que presumir, no sólo lleva años y años de mantener la tradicional preparación del cacao, sino que, también, su madre Doña Mati, a sus 80 años de edad es la chocolatera más antigua de San Pedro Cholula, todo un orgullo familiar.
Degustar el Xocolátl es toda una experiencia, sobre todo, cuando es servido en una tradicional jícara roja, una vasija empleada para tomar chocolate, y es aún más exquisito cuando se sabe que lo que se bebe proviene de una receta compartida entre familiares.
“Mi mamá toda su vida ha trabajado el cacao y ha venido de generación en generación, ella lo aprendió de su mamá, y su mamá de su suegra y así se ha venido trabajando esta receta”, comparte Doña Gloria, quien invita a los poblanos y turistas a visitarla.
Desde temprana hora, esta mujer se alista para llegar a su puesto de trabajo, coloca su olla de barro que aporta la humedad perfecta a la bebida de cacao, acomoda el resto de utensilios y manos a la obra: que vengan los rápidos e imparables giros del molinillo.
Todo, en el local 289 del mercado municipal de San Pedro Cholula, en donde Gloria y su puesto de cacao forman parte de una inmensa oferta gastronómica que acapara los cinco sentidos de sus visitantes con colores, sabores, sonidos, texturas y olores por doquier.
“En los tiempos antiguos, 500 años antes de nuestra era, Quetzalcóatl tomaba en las vajillas de Cholula, mandaba a traer sus vajillas que fueran de la loza de Cholula, el barro le da al cacao un sabor húmedo, fresco, artesanal, muy de nuestras raíces”, presume Gloria.
Simplemente irresistible, es como definen a la bebida de cacao un par de turistas que avanzan por la Plaza de la Concordia, en el corazón de San Pedro Cholula, previamente se sintieron atraídos por un característico olor y las ágiles manos de quien giró y giró un molinillo.
La mezcla es todo un manjar: frío, que refresca la garganta; uno, dos, tres sorbos y el degustador se siente extasiado y con la lengua se limpia la espuma que se quedó en los labios, el “sabor a nube” dicen otros conocedores cholultecas, el sabor que te lleva al cielo.